Reflexión
personal de Sandra Alberta de Sares Tchacussola.
Durante todo
lo que llevo de la asignatura de Organización y Gestión de Recursos Humanos,
puedo decir que he aprendido cosas interesantes. Pero ha sido al final del
primer bloque cuando con la teoría de la
Valencia me he dado cuenta que en los ejemplos de las aspiraciones del
trabajador siempre estaba; Éxito profesional, mejor SUELDO, y la aprobación del JEFE.
Creo recordar que en ningún momento hemos tocado el tema de LA FAMILIA.
En mi opinión
en esta sociedad capitalista en la que nos encontramos, con el simple objetivo
de hacer cada vez más dinero, las empresas no tienen en cuenta a la familia del
trabajador como otro factor más. Siendo esto para mi, casi tan importante como
el trabajador, ya que una buena situación familiar hace que este se encuentre
en mejor estado de ánimo y por lo
tanto pueda rendir más. Al igual que una familia implicada con la empresa en la
que uno de sus miembros trabaja, hace que todos los miembros tengan cierta RESPONSABILIDAD y LEALTAD a esta.
Para ello es
necesaria una serie de medidas de socialización entre los trabajadores entre sí,
y la empresa y su familia. Medidas como
viajes entre miembros de la organización, cenas, bonificaciones a los empleados
con familia, e incluso instalaciones para
los hijos de los empleados como guarderías.
Aunque hay empresas que si creen en este concepto
por desgracia, son la excepción que confirma la regla. No deja de ser
habitual el despido de mujeres por
quedarse embarazada apoyándose en mil y una excusas, o la discriminación
machista a la hora de contratar mujeres por considerar que al poder quedarse
embarazada no les va a salir “rentable”.
En
mi opinión la reducción de jornada en algunos casos se podría suplir con
algunas de las medidas que he aportado yo.
Ya que como vemos en la estadística considero esto hace que crezca la desigualdad salarial entre hombres y mujeres, y alejar
a la mujer del mundo laboral.
Por
desgracia las medidas para la conciliación laboral y familiar se centran solo
en la REDUCCIÓN DE JORNADA.
Según
un estudio elaborado por el Instituto Internacional de Ciencias Políticas “el
97,70% de las mujeres de las mejores empresas de conciliación tienen un
contrato a tiempo parcial para poder simultanear el trabajo con el cuidado de
personas dependientes y obligaciones familiares, frente al 2,30% de los
hombres. Además, señala que las excedencias por cuidado de hijos fueron
disfrutadas por el 95,90% de mujeres, frente al 4,10% de los hombres.”
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