lunes, 16 de noviembre de 2015

REFLEXIÓN PERSONAL HECHA POR MIGUEL PEREZ DE AYALA MARTINEZ.

EL CONTROL REAL Y LA ÉTICA EN LA FUNCIÓN PUBLICA

Mi reflexión personal quería hacerla sobre un tema de actualidad y es el control y la ética que  realmente llega a estar presente en una administración pública, es un tema de interés y bastante atractivo a mi parecer pues los grandes problemas de esta crisis han venido derivados de problemas de control y de ética en la gestión de lo público y las preguntas que nos debemos hacer son ¿Qué grado de control se ejerce en un organismo público? ¿Hasta qué punto se aplican los principios éticos impuestos por las leyes? ¿Es posible cambiar la tendencia de corrupción a través de la educación y el cambio generacional? Las respuestas queridos compañeros son simples y tristes, al menos desde mi punto de vista.
Siendo realistas no creo que darle un poder discrecional a una serie de personas sea lo más lógico pues con el paso del tiempo estas se corrompen y empiezan a corromper a toda la institución a través del tráfico de influencias el cohecho el secretismo (EN ASUNTOS QUE  INCUMBEN A TODA LA CIUDADANÍA) etc... Todo esto sumado al chantaje hace que al final tanto las personas con virtudes y las personas con vicios en su conducta se vean atrapadas en la misma telaraña de corrupción política.
Para más inri, hay que añadir que estas personas con sus vicios también controlan instituciones de control político, lo que convierte a esto en un verdadero cachondeo y si no las controlan de manera directa lo hacen a través del tráfico de influencias, esto a mi modo de ver las cosas no se arregla ni con educación (pues todas las personas al fin y al cabo presentan vicios que salen a la luz) ni con más control de instituciones que al fin y al cabo no sabemos quién o qué las dirige, se arregla con control CIUDADANO no político, a través de portales web de transparencia (PERO DE VERDAD NO COMO LOS DE HOY DIA) donde se diga en qué se invierten nuestros impuestos y para qué los usan.
También debería hacerse un control sobre la retribución de los altos cargos que dirigen las actuaciones de la administración pública porque cuando uno tiene unos sueldos tan elevados que se olvida de los problemas del vecino por que no vive en su misma realidad empiezan a surgir los vicios en esa persona y a corromper las instituciones que realmente están al servicio de todos los ciudadanos no de unos cuantos amiguetes como es tendencia últimamente.
También es verdad que se andaría bastante en este asunto con una buena educación sobre ética pública desde primero de primaria, pero eso sin complementarlo con control ciudadano es muy difícil de conseguir.
Por lo tanto, queridos compañeros, las respuestas a esas tres preguntas (si es que no ha quedado claro) son:
-          Hoy en día ninguna.
-          De una escala del uno al diez ahora digamos un 4 y antes de la crisis menos tres

-          Si pero hay que complementarlo con, control real, CONTROL CIUDADANO

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Comentario aportado por Iván Ramz García

    Gran reflexión compañero, mi gran pregunta es ¿ Quien controla al que controla? El control en este país como bien dices antes de la crisis era bastante bajo y como consecuencia así está el País. Los grandes casos de corrupción han desolado las arcas del Estado. Un control a priori de cada una de las Instituciones en las que se ha robado hubiera evitado problemas a posteriori. En la actualidad el control es bastante más alto, limitando incluso derechos fundamentales de la sociedad.

    La ética publica es una exigencia por parte de la sociedad hacia los poderes públicos, ya que son éstos los que deben preservar y ser modélicos para la actuación del país. Dicha ética ha de ser un principio capital para los políticos, ya que son los que han de rendir las cuentas y explicar la actuación de sus funciones. Sin más, un saludo compañero

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