sábado, 14 de noviembre de 2015

noticia aportada por Rosario Merino Rodriguez

Uno de cada dos científicos españoles retornados volvería a emigrar si surgiera una oportunidad laboral en el extranjero

imagen de la noticiaRecursos Humanos RRHH Press. La Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) y el Centro de Estudios Financieros (CEF.-) han presentado hoy los resultados del décimo informe Innovacef 2015.
Con este informe, de periodicidad anual, se pretenden conocer los niveles de confianza de los jóvenes investigadores que trabajan en España (JIES) y los de los científicos españoles en el extranjero (CIEX) con respecto a los sistemas nacionales de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) donde realizan su actividad. En la edición de este año se incluye como colectivo a estudiar a los científicos retornados a España (CRE).
Jóvenes investigadores que trabajan en España (JIES)
En el caso de los JIES, su índice de confianza en el sistema español de ciencia, tecnología e innovación (SECTI) arroja un valor de 4,2, manteniendo la misma cifra que en el informe del pasado año. Ello acredita una escasa confianza que no le permite superar la barrera de unas expectativas medias.
De todos los indicadores que componen este índice, únicamente el indicador de "Resultados" consigue superar esa barrera de unas expectativas medias, siendo los indicadores de "Organización de Personal" y de "Mercados y Cooperación" los más alejados de superar esta barrera mínima.
Científicos españoles en el extranjero (CIEX)
El valor obtenido del índice para los CIEX se sitúa en el 6,8, que constituye la cifra más alta desde que se elabora este informe. Ello acredita unas altas expectativas para este colectivo y, por el contrario, agranda la brecha con respecto a los científicos que trabajan en España (2,6).
Todos los indicadores sobrepasan holgadamente el nivel de la barrera de unas expectativas medias. Entre ellos, en primer lugar se sitúa el indicador de "Financiación", seguido por este orden por el de "Organización de Personal", "Mercados y Cooperación", "Resultados" y "Nuevos Desarrollos". Por aspectos, solamente no consigue superar el nivel de unas expectativas medias la acción comercial de los departamentos encargados de la transferencia del conocimiento científico.
Científicos retornados a España (CRE)
El índice de los CRE ha alcanzado un 4,8, quedándose al límite de superar la barrera de unas expectativas medias, pero, por el momento no lo sobrepasa. Los indicadores de "Mercados y Cooperación" y "Organización de Personal" son los indicadores más alejados de superar esta barrera de unas expectativas medias, sobre todo el segundo. En este aspecto, juegan muy en contra las expectativas de satisfacción de la carrera investigadora de este colectivo, que inclusive son inferiores a las ya escasas de los JIES.
Balance de circulación científica
Un 70,03% de los jóvenes investigadores que trabajan en España (2,7% menos que en el pasado año) tienen altas posibilidades de marcharse al extranjero. En cifras mucho menores se sitúa el porcentaje de CIEX que van a regresar a España con total seguridad (7,97%), aunque un 71,71% sí regresarían en caso de que surjan oportunidades laborales.
En el caso de los científicos retornados a España, tampoco es positivo que exista un mayor porcentaje de investigadores de este colectivo que piensan marcharse (21,69%), en comparación con los que no se irán (19,28%). Además, el porcentaje de los que es posible que se vayan en el caso de encontrar oportunidades laborales alcanza el 48,19%, y dadas las escasas expectativas de carrera profesional mostradas por este colectivo, existen serias probabilidades de que aumente el porcentaje de los que se vuelvan a marchar.
Estos datos atestiguan un balance negativo de la circulación científica en España. Según Pedro Aceituno, profesor del grado en ADE de la UDIMA e investigador principal del informe Innovacef 2015, "los índices de confianza presentan elevadas brechas entre las altas expectativas de los CIEX y las escasas de los JIES y de los CRE. Estas importantes diferencias perjudican el balance de circulación científica entre estos colectivos. Para mejorar este balance, los agentes del SECTI han de colaborar e implantar las medidas necesarias a fin de que se puedan generar oportunidades laborales que resulten atractivas para los científicos españoles y de otras partes del mundo".
Principales resultados de la encuesta
La gran mayoría de los científicos de estos colectivos tienen expectativas favorables en cuanto a que se puedan publicar sus nuevos conocimientos, encabezando este aspecto los CIEX (91,42%), seguido de los CRE (84,33%) y de los JIES (72,12%).
Las perspectivas favorables de patentar se mantienen reducidas para JIES y CRE (29% y 43%, respectivamente) y más altas para los CIEX con un 58,56%.
El 74% de los CIEX considera que se obtendrán nuevos o mejorados productos/procesos de sus proyectos de I+D+i frente al 54% de los CRE y el 51% de los JIES.
Únicamente el 26% de los JIES y el 31% de los CRE están recibiendo o va a recibir formación frente al 71% de los CIEX.
En lo que respecta a la satisfacción con la carrera científica ofrecida, el 86% de los CIEX muestran expectativas positivas con la misma, por un 77% de los CRE y un 67% de los JIES que manifiestan expectativas escasas o nulas en este aspecto.
El 67% de los CIEX tienen perspectivas positivas de que se contrate personal científico para la realización de sus proyectos de I+D+i, por un 28% para los CRE y un 22% para los JIES.
Para el 91% de los CIEX existen muchas posibilidades de que se aumente la inversión científica en su organización, frente a un 33% de los CRE y a un 29% de los JIES que muestran expectativas favorables en este mismo aspecto.
La acción comercial sistemática de los departamentos responsables de la transferencia del conocimiento científico en sus organizaciones está siendo efectuada adecuadamente para el 50% de los CIEX, frente a unos escasos 24% para los CRE y 20% para los JIES.
Un 84% de los CIEX tienen perspectivas favorables de colaborar con otros socios por un 65% de los CRE y un 41% de los JIES.
El 91% de los CIEX frente al 41% de los CRE y el 37% de los JIES están de acuerdo con la financiación percibida, aunque también consideran que sería aconsejable recibir una mayor cantidad de recursos económicos.
El 47% de los CIEX aseguran que con sus resultados ya se ha conseguido mejorar la competitividad de sus organizaciones, por un 40% de los CRE y un 28% de los JIES.
Por último, el 23% de los CIEX y de los CRE ya han conseguido la conversión de esta competitividad en beneficios económicos para su organización, por un 11% de los JIES, que ya han obtenido estas importantes ventajas.

2 comentarios:

  1. Comentario escrito por Antonio Gallardo García.

    Muy buena noticia expuesta por nuestra compañera Rosario, en la que se puede reflejar una realidad tan cierta como cruel, que es la emigración de nuestras personas más cualificadas hacia el extranjero, lo que comúnmente se denomina "fuga de cerebros".

    Este hecho hace ver cómo el Estado ha costeado la formación de estos científicos para que después, con la inoperancia estatal para poder proporcionarles un trabajo de estudio que sea competente con su formación y la poca posibilidad de empleo que existe debido a la crisis y a diversos factores, produzcan y patenten en el extranjero, privando así a que España puede ser pionera en diversas ramas de la ciencia. El recorte en los proyectos científicos llevados a cabo en suelo español y, por consiguiente, la reducción de salario a los científicos nos hace ver que éstos se marchan intentando que su proyecto pueda ser viable y salir a la luz, por lo que no reparan en irse a otro lugar si éste les proporciona aquello que necesitan para el desarrollo de dicho proyecto.

    Esta "fuga de cerebros" está siendo devastadora para los intereses estatales, ya que proyectos que dieron a luz aquí, por los recortes, han sido desarrollados en otros países, por lo que dependemos de esos países para poder usar el proyecto, lo que hace que la riqueza que el proyecto da, se quede en el país que ha desarrollado eso, no en el país que ha dado la formación y las herramientas necesarias para que el proyecto se ponga en marcha. Pero lo más flagrante de todo es que se haya invertido mucho tiempo y dinero para que después se pare el proyecto de buenas a primeras y viendo cómo otros países se lo llevan para su comercialización.

    El desarrollo del i+d en España es nulo, ya que se prefiere exportar los resultados finales de los proyectos acometidos en los países extranjeros que intentar ayudar al desarrollo de dicho proyecto para poder potenciarlo y así generar una riqueza que sería íntegramente española, lo que podría resultar de financiar más proyectos y así poder cimentar una estructura científica competente y no andar pidiendo a cada gobierno que nos dé sus resultados finales de dicho proyecto.

    Por otro lado, los científicos españoles en nuestro territorio no están bien remunerados ni lo suficientemente valorados por el desempeño que realizan en el marco del progreso de la sociedad, ya que han de pasar muchas horas y dedicar mucho esfuerzo y empeño para que el proyecto salga a la luz. Al no estar bien remunerados ni valorados, ellos anhelan con una valoración acorde a sus conocimientos intelectuales y a su alto grado de desempeño con sus proyectos, ya que es por lo que ha trabajado durante mucho tiempo. Cuando un país está interesado realmente en su proyecto y le valoran como es debido, el científico se marcha, dejando así una perdida intelectual como económica al conjunto de la sociedad española.

    Hay que cuidar un poco más a los científicos españoles que desarrollan una serie de proyectos que pueden ser un antes y un después en diversas ramas de la ciencia y poder cimentar una industria científica muy potente y atractiva para las inversiones foráneas. Hay que reconocerles su esfuerzo y su grado de trabajo, ya que esa persona ha desarrollado gran parte de su vida en un proyecto que puede ser muy importante para mucha gente.

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  2. Comentario realizado por Gisleno Núñez Fernández-Castillejas.

    Buenos días Rosario.
    La “movilidad exterior”, como así lo denominada nuestra (querida) Ministra de Empleo, entre los científicos españoles es algo que escuchamos con asiduidad en los medios de comunicación. Y es que, esta problemática la llevamos viendo desde 2008, coincidiendo con el inicio de la crisis. A medida que se ha ido prolongando ésta, España ha pasado de ser un país de fuerte inmigración extranjera a ser un territorio de emigración, motivado en su mayor parte por la salida de foráneos.
    Este fenómeno se debe, en gran parte, a que este colectivo es uno de los más afectados por el desempleo y los recortes sociales en gasto público.
    En España, la Comunidad Autónoma que se ha visto más afectada, según “El Confidencial”, es la Región de Murcia, en la que el flujo de emigrantes varió un 185.5% entre 2008 y 2012.

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