Reflexión personal: Fuga de cerebros

FUGA DE CEREBROS

Una vez más la ficción se adelanto a la realidad dando nombre a uno de los fenómenos migratorios que están sucediendo en nuestra sociedad. Por las diferentes controversias que ocurrieron tras la crisis de 2008, la gran mayoría de jóvenes altamente cualificados se ven avocados  a tener que buscar un futuro más halagüeño entre los distintos destinos mundiales, destinos  con un panorama económico  que se ajuste más a las expectativas de los jóvenes para poder alcanzar sus aspiraciones laborales y salariales. Tras la situación que creada por los diferentes gobiernos del país, que entre recortes en investigación y falta de inversiones en los diferentes campos laborales, han dejado un mercado laboral desértico y a más de un 25% de la población activa en situación de paro.

Los diferentes motivos por los que los jóvenes españoles se ven destinados a coger las maletas se pueden resumir en 4 motivos esenciales:

• ·         Falta de oportunidades:  El mercado laboral español tiene unas expectativas de trabajo casi nulas, la economía del país tan solo hace destruir empleo y cerrar puertas, ya no solo a jóvenes sino a personas de mediana edad que se ven apartados de la posibilidad de volver a trabajar.

• ·         Endurecimiento de las leyes laborales: Las condiciones laborales para el trabajador con las reformas de leyes, no dan expectativas de unas condiciones muy favorables para el trabajador.

• ·         Pérdida de poder adquisitivo: Las posibles retribuciones laborales del esquema económico español y el constante aumento de los impuestos hacen que el poder salarial del trabajador se vea disminuido sustancialmente, dado que las retribuciones no aumentan, por lo tanto pierde su capacidad de satisfacer sus necesidades y deseos.

• ·         Formación para una vuelta: Las posibilidades que se abren tras la formación en el extranjero son más abundantes en nuestro país que si nos quedamos en el mismo.

Las consecuencias a las que conducen esta situación social en los jóvenes son caóticas, ya que producen una constante frustración.  Sabiendo que por mucho que te prepares no tendrás la posibilidad de encontrar un trabajo que te dé estabilidad personal y económica cerca de tu familia, de tan si quiera cerca de tu ciudad o provincia. Todo esto sin llegar a sopesar que realmente puedas llegar a plantearte la posibilidad de que para llegar a alcanzar la posibilidad de ser feliz solo puedas volver a tu tierra por vacaciones, eso si tienes la suerte de encontrar un trabajo.

Las decisiones de nuestro aparato gubernamental no hacen más que nos sintamos inútiles en un rudo mercado laboral, en los que nos vemos igualmente preparados que cualquier ciudadano europeo pero con la imposibilidad de demostrar nuestra cualificación en un país que no hace más que arrastrarse por diferentes parlamentos pidiendo benevolencia económica para las cuentas estatales, sin pensar que la llave de la puerta de salida este en casa, jugándose el todo por el todo y apostando, mediante inversiones, en la sociedad.

Esta coyuntura social no permite llegar a imaginar una vida estructurada, cosa que por las predicciones de organismos, analistas y economistas no podremos hacer en una larga temporada, dado que en este frio horizonte que produce la crisis no se vislumbra la salida de un sol que nos aporte calor en forma de un trabajo digno.