Es bien conocido por todo el mundo que España se encuentra
en una situación económica bastante difícil. Dejando atrás las posibles razones
que han dado lugar a esta situación, me voy a centrar en las medidas que se
están tomando para “salir” de esta crisis, en especial aquellas relacionadas
con la Administración Pública.
Al parecer, y según demuestran las últimas medidas tomadas
por el Gobierno, los funcionarios públicos son los culpables de esta crisis.
Podemos encontrar opiniones que abarcan desde el clásico “Los funcionarios no trabajan”
hasta incluso “Es que hay demasiados funcionarios” y que generalmente carecen
de argumentos.
Ante estas críticas y las medidas tomadas por el Gobierno yo
me pregunto ¿Por qué tanto recortar? ¿Por qué no mejorar lo que tenemos?
En primer lugar
tenemos que saber que España es el cuarto país con menos funcionarios en Europa
en relación a la población, por debajo de países como Alemania o Francia, donde
la situación económica es distinta a la de España. Por lo tanto, creo que la
solución no está en “recortar” en este sentido.
A estos
funcionarios, no conforme con estar sumidos en un “estrangulamiento laboral”,
siempre se les está congelando el sueldo, quitando las pagas extras, aumentando
las horas semanales de trabajo, eliminando los conocidos como “moscosos” o “canosos”,
etc… Un sinfín de medidas que hacen de este sector uno de los peores parados
por la crisis en lo que a medidas del Gobierno se refiere.
Es cuando yo me hago
la pregunta mencionada anteriormente… ¿No sería mejor incentivar a estos
trabajadores y mejorar la eficacia de la Administración? ¿No es mejor reordenar
los recursos que tiene la Administración antes de pegarle el “tijeretazo”? ¿No
es mejor eliminar los muchísimos conflictos de competencias que existen, las
duplicidades, las instituciones innecesarias y los gastos impropios e
innecesarios?
Personalmente creo
que mediante la exigencia de mayor dedicación y esfuerzo por parte de los
servidores públicos, así como la modernización de la estructura administrativa,
la eliminación de trabas burocráticas y la supresión de duplicidades podríamos lograr
una mejora en la eficacia y eficiencia de la Administración Pública y por
tanto, sería más fácil hacer frente a los constantes problemas de la difícil situación
actual.
Entrada personal realizada por José Manuel Navarro Montes.
Datos tomados de:
Eurostat (Oficina estadística
de la Comisión Europea).
Estoy totalmente de acuerdo con esta reflexión, pero me gustaría añadir un punto de vista distinto.
ResponderEliminarImaginemos que los políticos por fin dejan de recortar y ahogar a los funcionarios y se centran mas en la supresión de órganos innecesarios o en la eliminación de las duplicidades o quizás en la supresión de puestos que no contengan competencias. Imaginemos por un instante en que los políticos que nos gobiernan lo hacen de forma leal, humilde y transparente. ¿No piensas que uno de los pasos a dar sería fijar los recortes en sus propios sueldos? ¿no crees que deberían recortar gastos como dietas, vehiculos oficiales, sueldos vitalicios..? como no creo que quieran quedar al descubierto mas de la cuenta y tirar piedras contra su propio tejado, supongo que lo mas facil es recortar de esta forma, para no tener que aplicarse sus propias reformas.