domingo, 3 de noviembre de 2013

"OUTSOURCING" Reflexión personal


Sevilla, 02/11/2013

REFLEXIÓN PERSONAL ACERCA DEL “OUTSOURCING”

      Tras leer el artículo que una de nuestras compañeras ha publicado en el blogger sobre la futurible desaparición, o al menos reducción del área de RRHH en las empresas, especialmente a nivel privado, en pro de la implantación de la técnica denominada “outsourcing” me han surgido múltiples interrogantes: ¿Estará también implantándose a nivel de las Administraciones Públicas? ¿En qué medida puede perturbar al desempeño del servicio público? ¿Cómo afectaría, de ser esto cierto, a los funcionarios? ¿Será beneficioso, o perjudicial? ¿La externalización de los servicios públicos mantendría el cumplimiento del principal fin de las Administraciones que es la satisfacción del interés general? Etc……etc…….etc.

       Lo primero que he hecho es informarme acerca de qué es este método, en qué consiste  y analizar sus ventajas y desventajas y me he encontrado con lo siguiente:
 “Outsourcing” es el uso de recursos exteriores a la empresa para realizar actividades tradicionalmente ejecutadas por personal y recursos internos. Es una estrategia de administración por medio de la cual una empresa delega la ejecución de ciertas actividades a empresas altamente especializadas”

      En realidad se trata de transferir los riesgos a un tercero que pueda dar garantías de experiencia y seriedad en el área contratada, que presta unos servicios pasando a ser parte de la empresa, pero sin incorporarse formalmente a la misma.

      Es preciso aclarar que Outsourcing es diferente de relaciones de negocios y contratación, ya que en éstas últimas el contratista es propietario del proceso y lo controla, es decir, le dice al suplidor qué y cómo quiere que se desempeñen y se fabriquen los productos o servicios y éste no podrá variar las instrucciones. En el caso del Outsourcing el comprador transfiere la propiedad al suplidor, es decir, no instruye al mismo en como desempañar una tarea sino que se enfoca en la comunicación de qué  resultados quiere y le deja libre el proceso de obtenerlos.

     El outsourcing permite controlar los costes y ser más eficientes y ello se debe a que cuando la Administración externaliza un servicio surge la necesidad de controlar de forma sistemática la calidad de la prestación recibida y el coste que ello ha supuesto. Además permite obtener flexibilidad en la mano de obra pues no contrata a un trabajador sino los servicios de una empresa por un tiempo limitado y es ésta  la que deberá preocuparse por las relaciones laborales y sus costes vinculados. El outsourcing convierte costes fijos (los de los trabajadores en plantilla) en costes variables (se contrata según la necesidad del momento).

      A pesar de estas ventajas apreciadas considero que el outsourcing también puede tener efectos negativos en la imagen de las administraciones públicas como puede ser que los ciudadanos perciban un distanciamiento con la Administración al interponerse entre ambos la empresa privada que presta los servicios externalizados; ven como la Administración se vacía de contenido y lo más alarmante  y frecuente en nuestros días es la politización en la prestación de servicios: los políticos han intervenido en demasiadas ocasiones en la contratación con proveedores privados, habiendo no pocos casos de corrupción y favoritismos a la hora de otorgar los contratos públicos.

      Tras esta exposición hago la siguiente reflexión: ¿Por qué la Administración no adopta la metodología de las empresas que prestan estos servicios outsourcing?; ¿Por qué la Administración no invierte en formación lo suficiente para sus funcionarios y así no tener que contratar servicios externos?; ¿Por qué no se provee de tecnologías y estrategias suficientes para prestar sus servicios en vez de derrochar en inutilidades?; ¿Por qué la Administración no ejerce un control interno efectivo de su actividad y de su personal? 

1 comentario:

  1. El outsourcing ha llamado la atención tanto de empresarios como de
    autoridades, básicamente por las acciones que se han emprendido tratando de
    desmotivar el uso de este esquema.

    Normalmente las compañías que ofrecen estos servicios se acercan a las
    empresas y les ofrecen respetar la antigüedad de los empleados, pagarles lo
    mismo y brindarles los mismos servicios a un costo más barato.

    Con esa promesa en mente, buscando subsistencia en una época difícil y en
    un mercado muy competido, es difícil de rechazar la oferta, sin embargo no
    hay que tener una bola de cristal para ver que el ahorro que se obtendrá no es
    porque la empresa que prestará el servicio está dispuesta a ganar menos. En
    una situación así, el costo se debería ver incrementado.

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.