RELEXIÓN PERSONAL SOBRE LA FUNCIÓN PÚBLICA EN ESPAÑA.

RELEXIÓN PERSONAL SOBRE LA FUNCIÓN PÚBLICA EN ESPAÑA.

REFELEXIÓN PERSONAL REALIZA POR; ROCÍO DÍAZ DEL VALLE

En mi opinión, la igualdad y la transparencia en el acceso a los empleados públicos que propugna nuestra Constitución es una mera quimera.

Durante los últimos años hemos visto como se ha  incrementado el número de cargos de confianza y asesores que mantiene el equipo de gobierno y al enchufismo de familiares  cercanos. Es curioso que familias completas de concejales del equipo de gobierno del PP y UCB hayan encontrado un trabajo durante el último año en empresas proveedoras de servicio para la administración municipal. Parece mucha casualidad, y no queremos pensar en que este tipo de favores finalmente tengan que  devolverse.

Esto tiene una grave consecuencia,  para el resto de vecinos del municipio, muchos de ellos parados por la grave situación económica, que no saben cómo llegar a fin de mes.

Apartan al funcionario responsable, profesional e independiente, que ha ganado su plaza por méritos propios, y capacidad y enchufan al familiar o amigo del concejal de turno,  lo cual me parece muy lamentable.

“Hay personas que hacen el trabajo de los funcionarios y que pueden acceder a información sensible de la base de datos con el Hermes, un programa interno de la Delegación de Empleo. Con todos los respetos, es como si un juez no puede hacer su trabajo y ponen a un camarero a impartir justicia”. 

Por ello, ley del enchufismo, impulsada por el presidente José Antonio Griñán, por la que 25.000 personas se convirtieron en empleados públicos al ingresar en el conglomerado de agencias públicas creadas por la Junta de Andalucía sin haber pasado ninguna prueba

En mi opinión, esto es indignante y desmotivador, Si se quiere mantener ese personal en las agencias públicas, que convoquen una oposición.

 El problema lo han creado ellos. No es la solución que entre gente por la puerta de atrás. Los que hay son sobre todo afiliados al PSOE, gente que ha abandonado cargos públicos.

Una solución sería  despedir a ese personal, sin embargo el desempleo subiría en una comunidad autónoma que ya cuenta con el 35% de paro.

 Para así poder contratar a personas realmente cualificadas superando las pruebas y de acuerdo con los principios de mérito y capacidad, y todos tener las mismas oportunidades a la hora de optar a un trabajo.